5 usos del jabón que tal vez no conocías

Aunque parezca algo que no tenga mucha lógica o razón, lo cierto es que el jabón tiene otros que muy pocos conocen, además del que se utiliza para lavar las manos, bañarse o limpiar trastos.

Y es que como sociedad estamos más inmersos en otros aspectos que dejamos de un lado los usos que les pudiéramos dar a otros productos, pues solo estamos acostumbrados a seguir lo que los demás hacen.

Por si no lo sabías, el jabón tiene muchos más usos que solo el del baño o el lavabo, por lo que investigando un poco más descubrimos algunos de ellos, que precisamente es lo que te vamos a presentar ahora.

Esta ocasión te traemos “5 usos del jabón que tal vez no conocías“:

1.- Clavar clavos

Esto no es un trabalenguas, pero a veces colocar un clavo puede ser tan o más difícil que decir un trabalenguas complicado. Dile adiós a los días en los que te golpeabas al colocar un clavo en la pared; y todo gracias al jabón. Frota el jabón por el mango del clavo y listo.

2.-Lubrica las barandas de los cajones

¡No existe nada más molesto que los cajones cuando se trancan! Quieres sacar el make up, se tranca; quieres sacar el peine, se tranca; ¡qué fastidio! La solución está en el jabón. Lubrica las barandas metálicas de tus cajones con jabón y se deslizarán como nunca.

3.-Aleja los insectos de tus plantas

Mantén los insectos alejados de tus plantas mezclando jabón con agua y rociando esta mezcla en la parte inferior de las hojas. ¡Tus plantas se verán más hermosas que nunca!

4.-Arreglar los revestimientos de aluminio o vinilo

Si por esas cosas los revestimientos de la puerta de enfrente están un poco torcidos o se corrieron del lugar, es necesario que los devuelvas a su sitio para que tu puerta de entrada no luzca desaliñada. Toma una herramienta abridora, ponle un poco de jabón y manos a la obra.

5.- Limpiar las repisas de las ventanas

Este es uno de los lugares donde se junta más suciedad, ¿no te parece? Y pocas veces le prestamos atención a su limpieza. Pero puedes empezar a hacerlo con este consejo: toma una barra de jabón, humedece uno de sus extremos y limpia esa pequeña línea entre la ventana y la repisa.

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